El seguro de moto, el seguro de coche, el seguro de hogar, el seguro de vida… son muchos los seguros a los que tenemos que hacer frente, lo que nos lleva a tener que ser muy cuidadosos con el presupuesto que destinamos a esta partida. Por eso queremos proponeros 5 consejos muy sencillos que te permitirán ahorrar y evitar sustos a la hora de contratar seguros.
1. No contrates otro seguro antes de saber qué pasa con el anterior
A la hora de contratar un nuevo seguro es muy importante que tengas en cuenta lo que establece la Ley a la hora de cancelar el seguro que tenemos en vigor. En su artículo 22, la Ley de Contrato del Seguro establece la obligatoriedad de comunicar con dos meses de antelación la baja o la cancelación de un contrato de seguro.
Otra cuestión relacionada con esto y muy importante: el contrato es de duración anual, independientemente de la forma de pago que se haya establecido para su pago (por ejemplo, el pago fraccionado de forma mensual, trimestral, semestral…). En muchas ocasiones hay quienes creen que al pagar de forma fraccionada el seguro es de carácter mensual y no anual, pero esta consideración es falsa.
De no comunicar la cancelación del seguro de este modo la Compañía no tendrá la obligación de devolverte el importe proporcional a los meses que quedan de contrato.
Es decir, contratar un nuevo seguro sin saber fijo qué pasa con el anterior puede hacer que acabes con dos seguros en vigor al mismo tiempo, el que acabas de contratar y el que ya tenías y pensabas cancelar.
Esto sería un duro golpe para tu bolsillo que hay que evitar a toda costa. Así, el ahorro empieza por hacer las cosas bien y de acuerdo a lo que establece la Ley de Contrato del Seguro.
2. Consulta comparadores de seguros de calidad
Internet y el desarrollo del sector seguros en la red ha multiplicado de forma exponencial nuestras posibilidades a la hora de comparar precios de seguros de una forma rápida y cómoda. Pero para que lo barato no nos salga caro es muy importante que tengamos en cuenta algunas claves a la hora de contratar seguros online y barajar nuestras opciones entre comparadores de seguros de calidad:
- Precio definitivo: Asegúrate de que el tarificador que estés usando sea fiable y te pida los datos básicos necesarios para poder ofrecerte una tarifa definitiva. Las aseguradoras necesitan saber, por ejemplo, qué edad tienes, en caso de seguro de coche, los años de antigüedad del permiso de conducir, o en caso de seguro de salud, qué modalidad de seguro quieres (con copago, sin copago…).
En caso de que hayas consultado tu póliza en un tarificador que no te haya exigido todos los datos necesarios, te encontrarás tan sólo con una tarifa orientativa que luego se verá incrementada.
- Calidad del seguro: Es importante que tengas en cuenta la calidad de la compañía aseguradora, por ello, como un paso más dentro del proceso, deberás comprobar que tipo de aseguradoras aparecen entre los resultados que te ofrecen los comparadores.
- Información detallada: Exige que la información de los seguros aparezca de forma detallada, sobre las coberturas que incluyen y las que no, sólo así podrás conocer el producto por el que estás pagando y evitar las sorpresas.
3. Compara precios y coberturas
Sólo comparando precios podrás encontrar los seguros que mejor se ajusten a tu bolsillo y no pagar de más. Como vimos en el punto anterior, Internet nos lo pone muy fácil a la hora de comparar y ver el mayor número posible de alternativas.
En este punto es muy importante que tengamos claro el criterio con el que vamos a comparar los seguros.
Si bien podemos encontrar precios bajos, es imprescindible que consideres qué coberturas están incluidas en dichos precios, puesto que de querer añadirlas con posterioridad podrán disparar el coste final de tu seguro.
4. Contrata coberturas ajustadas a tus necesidades
Paga por lo que necesitas, para ello es importante que revises las coberturas que tienes contratadas y que las adaptes a tus necesidades reales.
Si no has revisado las coberturas de tu seguro en mucho tiempo podrás encontrarte con coberturas innecesarias o con una franquicia elevada.
En todo caso debemos ser cuidadosos a la hora de reducir las coberturas o los capitales asegurados, y es que no podemos caer en el error de estar asegurados por debajo de nuestras necesidades. Un ejemplo claro de esto se da con mucha frecuencia en los seguros de hogar, es el llamado infraseguro.
El infraseguro se produce cuando se atribuye al objeto asegurado un valor inferior al que realmente tiene, y esta situación puede llegar a acarrear consecuencias muy graves en caso de siniestro, puesto que estaremos perdiendo el valor de aquellos bienes que no están asegurados.
5. Consulta a un experto
No te quedes con dudas y consulta a un profesional de seguros si necesitas cualquier aclaración. En Seguros Benítez García te asesoramos de forma profesional y objetiva sobre el producto que mejor se adapte a tus necesidades, y ten por seguro que no te saldrá más caro que contratar el seguro directamente con la Compañía.
La creencia de que contratar el seguro en un agente es más caro es totalmente falsa. La Agencia se lleva un porcentaje, pero es una comisión de lo que normalmente se llevaría la Compañía, por lo que no afecta en ningún momento al precio de la prima que vas a contratar.
Destacan dos aspectos dentro de la misión de los mediadores de seguros:
- El cliente se beneficia de un asesor experto que gestiona sus contratos de seguro y le representa ante la aseguradora en los trámites necesarios para la emisión, modificación o cancelación de la póliza, así como en cualquier eventualidad que pueda surgir: siniestros, renegociaciones de las primas…
- PERO el cliente no es el único beneficiado. La compañía capta el cliente y gestiona sus pólizas, labor de la que queda liberada la Compañía (funciones de comercialización y gestión). De esta forma, la labor de la Compañía queda muchas veces reducida a la recaudación de la prima y al pago del siniestro.
Un buen ejemplo de esto es el hecho de que, en ocasiones, el agente representa un volumen de clientes tan importante para la Compañía Aseguradora que ésta está dispuesta a ofrecerle el contrato de seguros en condiciones más ventajosas que a un particular que se dirija directamente a la compañía.
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